Oh, seguramente, preciosos hijos de Dios que buscáis
el sendero de retorno a Casa a la Maestría, que buscáis alivio y liberación del
dolor, de las sombras y la oscuridad, de la limitación y vasallaje de toda
índole y descripción, seguramente ustedes pueden aceptar que la Presencia de
Dios es Todopoderosa, y que está más cerca que los pies y las manos, más cerca
aún que el mismísimo aliento en vuestras fosas nasales, ya que la Presencia es la Vida que palpita en vuestros corazones.
Tengo el más profundo deseo de ayudar a todos y cada
uno de ustedes -individualmente-
a que acepten que en este universo
sólo hay UN PODER que puede actuar, y que ese Poder actúa para ustedes según la Fe que tengan
en Él. ¿Acaso rehusarán aceptar que viva dentro de vuestro cuerpo
físico se encuentra la Llama sanadora? ¿Que vivo dentro de vuestro cuerpo
físico se encuentra el infinito Poder Suministrador de toda necesidad y
requerimiento que podáis tener? ¿Que viva dentro de vuestro cuerpo físico está
la Iluminación de vuestra conciencia externa? ¿Y que viva dentro de vuestro
cuerpo físico está la Inteligencia mediante la cual todas las formas puedan
cederles la Perfección que está contenida en su propia esencia primigenia?.
Los conozco bien. Los he conocido
durante mucho tiempo -mucho antes de que hubieran escogido auto-aceptarse como
estas limitadas y mortales formas de decadencia. Yo atestigüé la creación de
vuestro propio Glorioso Ser Crístico desde el
Cuerpo de los Padres- Dioses de esta evolución, extrayendo de Su Propia Luz,
moldeando de la Sustancia-Luz Universal esos cuerpos exquisitamente perfectos,
encendiéndolos con el Fuego de la Creación, confeccionados con abundante
gracia. Ojalá pudiera poner Mis manos sobre vuestros ojos para que las escamas
puedan ser descartadas de ellos y puedan ver revelado el Patrón Divino y Plan
de vuestro Santo Ser Crístico pulsando y real, que ha esperado durante aeones
de tiempo por la oportunidad de exteriorizar Su Majestuosa Gloria a través de la vestimenta de carne
provista por Su Propio Amor!.
¡Ojalá pudiera poner Mis manos sobre vuestros oídos para que estos se abrieran
a escuchar la Voz de vuestra Presencia y sintieran la UNICIDAD entre esa Presencia
y el latido de vuestro corazón!.
Amados Míos, durante muchos millones
de años este exquisito y perfecto Ser -a quien es Mi privilegio y honor representar
para toda la evolución - ha sostenido la vida de vuestro mismísimo cuerpo, os
ha envuelto en una radiación de protección de manera que la luz
de vuestra alma no fuera extinguida por los excesos de vuestro uso de las energías vitales en la satisfacción de los sentidos.
Hemos llegado ahora a un Momento Cósmico en que estos Santos Seres Crísticos
han pedido a la Ley Cósmica una oportunidad para apartar vuestro libre albedrío
el tiempo suficiente para daros Perfección; para quitaros sólo la cantidad
suficiente de ese libre albedrío mediante el cual habéis tejido vuestras cadenas y miserias, de manera
que podáis saborear la felicidad que emana de la cooperación con la Ley de Armonía,
Belleza y Suministro Infinito.
Tomado del Libro Puente a La Libertad " El Amor Sigue Siendo El Camino"