Hay
un trabajo que hacer", era la expresión común en el ejército durante la
última guerra, y quería decir que el soldado individual, de alto o bajo rango, sabía que
había una tarea que realizar haciendo caso omiso de sacrificios personales o dificultades
involucradas .
Ahora, cada uno de nosotros tiene un
trabajo que hacer; no el trabajo en el taller, o en la oficina, o en la
fábrica, o en casa, ya que ése tan sólo es una pequeña porción del todo
-nuestro puesto en el flujo económico-, sino que cada uno de nosotros tiene un
trabajo que hacer, y se trata de la cuestión de vivir la vida misma.
Es un trabajo que no sólo requiere del mejor uso de los
talentos y equipo que se nos han dado, sino que es un trabajo que tiene que
incluir la oración, la
meditación y
la comunión con Dios.
Podrás hacer. la vida armoniosa y bella en la medida
que dejes que Dios se desenvuelva. más y más a través de ti en la medida
en que dirijas tu atención a Él buscando guía e inspiración, en la medida en que
en verdad «practiques la Presencia de Dios» en tu :vida diaria. O puedes asumir el trabajo
de vivir una vida miserable y peligrosa si te olvidas de Dios y pretendes
hacerlo sólo.
Pero de que tendrás que hacer el trabajo, tendrás que
hacerlo, y en vista de que Dios te ha dado el libre albedrío, de ti depende
escoger cómo habrá de hacerse.
«Dulce será mi meditación en él; Yo me regocijaré en el Señor» Salmo
104:34
Tomado del Libro " Reclama Lo Tuyo " .-Emmet Fox