¿Por qué no organizar el negocio de vivir en grande?
¿Por qué arrastrarse como alguna gente hace, de un
pequeño trampolín a otro, en vez de avanzar a trancos
valientemente? ¿Por qué estar contentos con una po
bre salud, un trabajo aburrido o condiciones limita
das, cuando mucha otra gente ya se ha elevado por
encima de estas cosas?
Hay una salida de la limitación que nunca falla .Es es
ta: toma a Dios por socio .Si realmente vas a hacer a
Dios tú socio de negocios en todo departamento de tu
vida estarás sorprendido de los rápidos y notables re
sultados que obtendrás. Por supuesto, si quieres que
Dios sea tu socio, tendrás que incluirlo en toda esqui
na y en toda fase de tu vida.
La mayoría de la gente se emocionaría de asociarse,
con algún gran industrial o magnate financiero. Po
drían sentir que su futuro está asegurado .Sin embar
go, aquí esta una sociedad con Infinita Sabiduría y
con Infinito Poder aguardándote.
Yo soy la vid, vosotros los pámpanos; el que permanece en mí,
y yo en el, este lleva mucho fruto; por que separados de mi nada
podéis hacer. (Juan: 15-5)
Extraido del libro "Un año con Emmet Fox",lectura correspondien
te al dia de la fecha.