Y la respuesta es que LA DEMOSTRACIÓN - al
igual que todo
lo demás - TIENE SU PRECIO; Y el precio es que tenemos que nacer de nuevo y que, en lo secreto de nuestros corazones, muy a menudo ése es el precio que no estamos dispuestos a pagar. Estamos enamorados del hombre actual
y de todas las cosas que lo constituyen y no estamos preparados a matarlo para que el otro pueda nacer.
Entramos a
la Verdad
con nuestro dedo meñique
y las grandes cosas no llegarán hasta que entremos con todo el cuerpo. He aquí toda la dificultad.
Entrar a la Verdad con todo
el cuerpo es llevar todo
pensamiento consciente y creencia a la piedra de toque de la
Inteligencia Divina
y del Amor Divino. Es rechazar toda cosa mental o
física que no se equipare con el estándar. Esto
se hará para revisar toda opinión, todo
hábito de pensamiento, toda
política, toda rama de conducta
práctica, sin excepción
alguna.
Esto, por supuesto, es algo realmente tremendo. No es una mera limpieza primaveral del alma. Es nada menos que un desmantelamiento a gran escala, y una completa reconstrucción
de toda la casa. No ha de
sorprender que los únicos
que no le sacan el cuerpo a
ésto son los de espíritu fuerte.
Y, sin embargo, no ha de sorprender que si no se hace esto,
en realidad no se irá
a ninguna parte.
Esto entraña,
como dijera
Pablo, "morir diariamente".
Entraña
despedirse de todos los
prejuicios que hemos heredado
y adquirido durante toda nuestra vida. Entraña amputar todas las pequeñas faltas de carácter, vanidades mezquinas,
engaños menores y todas esas formas menores de
egoísmo y orgullo que cristalizan nuestras coyunturas espirituales y que tan queridas nos resultan. Podrá entrañar la renuncia a lo más grande de nuestra vida presente,
pero si este es el caso
... bueno, ese será el precio
que pagar, y
punto.
Si
no estás dispuesto a pagar este
precio, no hay problema; pero no debes
esperar recibir de la Ley más
de lo que pagas. Un dedo meñique en la Verdad
está bien, pero sólo puede
producir
un resultado de dedo meñique. Para una demostración
de cuerpo entero,
el cuerpo entero
tiene que estar lleno de luz.
Os es
necesario nacer de nuevo.
Tomado del Libro " Mi Amigo Emmet Fox "