Les Sucede a algunos estudiantes de oración que son especialmente fervorosos, que le dedican mucho tiempo al estudio y la meditación, y que hacen más progreso que el promedio, que viene un tiempo cuando el trabajo ordinario de todos los días empieza a parecer insípido, tedioso y como que no vale la pena. Una persona tal puede tener una posición interesante e importante, la cual la mayoría de la gente consideraría ideal. Pero ya no está contento o feliz. Le gustaría renunciar a la vida de negocios por completo y dedicar todo su tiempo a su desarrollo espiritual.
La curación de este problema es primero saber que muchas personas tienen que enfrentarlo. No es en nada raro o peculiar de una persona; y aquellos que lo tienen, siempre salen bien de él y se encuentran más felices que nunca, ya que esta dificultad en particular sólo les sucede a las personas sinceras y fervientes. Tales personas usualmente pasan demasiado tiempo en oración y meditación, y se saturan.
Habiendo salido bien de esa etapa, siempre Se encuentran más interesados que nunca en sus negocios; hacen mucho mejor trabajo y ,al mismo tiempo, progresan mucho más rápido en sus vidas espirituales, y tienen mucho más poder en la oración que antes.
Yo conozco que todo lo puedes ,y que no hay pensamiento que se esconda de ti. (Job42:2)
Extraido del libro " Un año con Emmet Fox "
La curación de este problema es primero saber que muchas personas tienen que enfrentarlo. No es en nada raro o peculiar de una persona; y aquellos que lo tienen, siempre salen bien de él y se encuentran más felices que nunca, ya que esta dificultad en particular sólo les sucede a las personas sinceras y fervientes. Tales personas usualmente pasan demasiado tiempo en oración y meditación, y se saturan.
Habiendo salido bien de esa etapa, siempre Se encuentran más interesados que nunca en sus negocios; hacen mucho mejor trabajo y ,al mismo tiempo, progresan mucho más rápido en sus vidas espirituales, y tienen mucho más poder en la oración que antes.
Yo conozco que todo lo puedes ,y que no hay pensamiento que se esconda de ti. (Job42:2)
Extraido del libro " Un año con Emmet Fox "