Letra de la canción a Lady Meta

Lady Meta,es tu amor

un ejemplo para mi.

Quiero ser Tu Sanación

Para la Gloria de Dios


En el Nombre del " YO SOY "

Traes la Iluminación;

enseñando por doquier

la causa de la aflicción.


Mira nuestra humanidad

Anhelante de dar fin

A lo que impide ser

Nuestro Plan Divino Aquí.


Lady Meta ,escúchanos ,

Hoy venimos a servir

Ofrecemos a Tu Ser

nuestro momentum de Luz


Ven descarga el poder

Sanador del " YO SOY "


Lady Meta gracias por

traer de Venus aquí ;

Tu conciencia de humildad,

de Servicio y de Paz


Invocamos desde las

Ciudades Etéricas

Los Rayos que disuelven

la causa de enfermedad


Decretamos junto a Ti:

" YO SOY " LUZ y SANACIÓN

en la Tierra por siempre " YO SOY "









domingo, 29 de septiembre de 2013

NOBLE ÓCTUPLE SENDERO

De hecho las Bienaventuranzas conforman un poema en prosa que consta de ocho versos, el cual es un todo de por sí y constituye lo que prácticamente es un resumen general de toda la enseñanza cristiana. Un resumen general como éste es típico del modo oriental de abordar la enseñanza religiosa y filosófica, y es natural que nos recuerde al Noble Óctuple Sendero del Buddhismo, a los Diez Mandamientos de Moisés, y a otros compendios semejantes.
Jesús se ocupó exclusivamente de enseñar principios generales, y estos siempre tienen que ver con estados mentales, ya que El sabía que si los estados mentales de uno están bien, todo lo demás tendrá que estar bien; mientras que si están mal, nada podrá estar bien. A diferencia de los otros grandes maestros espirituales, Jesús no da instrucciones detalladas en cuanto a qué habremos de hacer o no hacer; no nos dice qué comer o beber, ni lo contrario. Tampoco nos dice que llevemos a cabo diversos rituales en ciertos momentos y estaciones. Sin lugar a dudas, toda la corriente de sus enseñanzas es anti-ritualista y anti-formalista.
Jesús tenía poca paciencia para con el sacerdocio judío y su teoría de salvación mediante ceremonias realizadas en el Templo. «La hora viene cuando ni en ese monte ni en Jerusalén adoraréis al Padre-o Mas la hora viene, y ahora es, cuando los verdaderos 
adoradores adorarán al Padre en espíritu y en verdad; porque también el Padre tales adoradores busca que le adoren. Dios es Espíritu; y los que le adoran, en espíritu y en verdad es necesario que adoren. » 


Tomado del Libro "El Sermón del Monte" de Emmet Fox