«Bienaventurados los mansos, porque ellos recibirán
la tierra por heredad»
A primera vista esta Bienaventuranza parece tener
muy poco sentido, y los hechos de la vida diaria parecen contradecir el poco
que tiene. Ninguna persona sensible que contemple el mundo o que estudie
historia podrá aceptar plenamente este aforismo en su valor nominal, y la
mayoría de los cristianos honestos lo han pasado de largo en la práctica,
sintiendo con pena que no hay duda que así es como deberían ser las cosas, pero
que ciertamente no lo son a la hora de la hora.
Pero esta actitud no está en nada. Tarde o temprano
el alma llega a un punto en que tiene que descartar toda evasión y subterfugio
de una vez por todas, y encarar de frente los hechos de la vida al costo que
sea.
Ahora bien, o Jesús hablaba en serio, o no; o sabía de lo que estaba hablando, o no. Y de
ser así, si lo dicho no ha de ser tomado en serio, entonces somos arrastrados a
una posición que sería rechazada por todo cristiano -ya sea que Jesús estaba
diciendo cosas en las cuales realmente no creía (como lo hace gente
inescrupulosa) o estaba hablando tonterías.
Tenemos que encarar esta situación en el mero principio de nuestro estudio de
este Sermón del Monte. O tomamos en serio a Jesús o no, en cuyo caso su
enseñanza entonces debería descartarse por completo y las personas deberían
dejar de llamarse "cristianos". Hablar
bien de Jesús de los labios para afuera, decir
que el Cristianismo es la Verdad divinamente inspirada, hacer alarde de ser
cristiano y entonces calladamente evadir en la práctica todas las implicaciones
definitivas de su enseñanza,
es una hipocresía y debilidad de la peor clase. O Jesús es un guía confiable o no lo
es. Si vamos a depender de Él, entonces démosle el beneficio de asumir que
cuando hablaba, lo hacía en serio, y que conocía mejor que nadie el arte de
vivir. Los problemas y angustias que experimenta la humanidad se deben en realidad
al mero hecho de que su manera de vivir es tan opuesta a la Verdad, que las
cosas que Él enseñó y las cosas que dijo a primera vista parecen tontas y
descabelladas
Lo cierto es que cuando a las enseñanzas
de Jesús se les entiende correctamente, no sólo son verdad sino que son
extremadamente prácticas; es más, constituyen la más práctica de todas las
doctrinas. Encontramos que Jesús estaba lejos de ser un soñador sentimental, que no era un mero dispensador de trivialidades;
sino que, más bien, era un resuelto realista como sólo lo puede ser un gran
místico. y toda la esencia de su enseñanza y de su aplicación está resumida en este texto.
Esta Bienaventuranza forma parte de la media docena
de los versículos más importantes de la Biblia. Cuando se está es posesión del significado espiritual de este texto, se tiene el
Secreto del Dominio -el secreto para superar toda dificultad. Es literalmente
la Llave de la Vida.
Es el mensaje de Jesucristo reducido a una sola frase. Este sentencioso aforismo
es, de hecho, la Piedra Filosofal de los alquimistas que
trasmuta el metal burdo de la limitación y los problemas en el oro del "confort" o la verdadera armonía.
Tomado del Libro "El Sermón del Monte " de Emmet Fox