Jesucristo es fácilmente la figura más importante que jamás haya aparecido en la historia de la humanidad.
Poco importa cómo lo puedas considerar, en esto tendrás que estar de acuerdo.
Esto es verdad sea que decidas llamarle
"Dios" u "hombre"; y si decides llamarle
hombre, poco importa si escoges considerarlo como el mayor profeta y maestro del mundo o meramente un fanático
bien intencionado que salió mal parado y se arruinó después de un breve y tormentoso
ministerio público. No importa cómo le consideres, el hecho quedará que la vida
y muerte de Jesús -tanto como las enseñanzas que a Él se
atribuyen- han influenciado el curso de la historia humana más que ningún hombre que jamás haya vivido; más que Alejandro, o César, o Carlomagno, o Napoleón, o Washington. Las doctrinas de
Jesús (o, al menos, por las doctrinas que se le atribuyen en la actualidad) han
influenciado las vidas de más personas; más libros se escriben, se compran y se
leen con respecto a Él; más discursos se redactan (llámenlos sermones) con
respecto a Él; que con respecto a todos los otros nombres juntos que
mencionamos arriba.
El haber sido la inspiración religiosa de toda la
raza europea a lo largo de los dos milenios durante los cuales dicha raza
dominó y moldeó los destinos del mundo entero -tanto
cultural y socialmente como políticamente-, y a lo largo del período en que la totalidad de la
superficie del planeta fue finalmente descubierta y ocupada (y en términos
generales moldeada) por la civilización... esto de por sí le hace merecedor de
la primera posición en importancia mundial.
Por lo tanto, no puede haber una tarea más importante que la de inquirir e investigar la
real y verdadera posición de Jesús.
¿Qué enseñó Jesús? ¿En realidad qué quería que
nosotros creyéramos e hiciéramos? ¿Cuáles eran los objetivos que, en realidad,
tenía en mente? y, ¿qué tan lejos llegó en cuanto a lograr tales
objetivos tanto en su
vida como en su muerte? ¿Qué tanto la religión o movimiento llamado Cristianismo
-según ha existido durante los últimos diecinueve siglos- ha expresado o representado sus ideas? ¿Qué tanto
la Cristiandad de hoy día presenta su mensaje al mundo? Si Jesús hubiera de
regresar hoy día, ¿qué diría de las auto-denominadas naciones
cristianas en general, y
de las iglesias cristianas en particular --de
los anglicanos, los bautistas, los católicos, los
ortodoxos griegos, los metodistas, los presbiterianos, los
cuáqueros, los salvacionistas, los adventistas del séptimo día,
los unitarios ... listándolos en orden alfabético?
¿Qué fue lo que Jesús en realidad enseñó?
Ésta es la pregunta que me he
propuesto responder en este libro. Me propongo demostrar que el mensaje que
Jesús trajo tiene un valor singular porque es la Verdad, y es la única
afirmación perfecta de la Verdad de la naturaleza de Dios y del hombre, y de la
vida, y del mundo; y de las relaciones
que existen entre ellos. Y más que esto, encontraremos que sus enseñanzas no
eran simples relatos abstractos del universo (lo cual no generaría otro interés que el meramente académico), sino que constituye un
método práctico para el desarrollo del alma y para la conformación de nuestras
vidas y destinos en lo que queramos que sean.
Jesús nos explica lo que son la
Naturaleza de Dios y la de nosotros mismos; nos da el significado de la vida y
de la muerte; nos muestra por qué cometemos errores; por qué cedemos a la tentación;
por qué nos enfermamos, nos empobrecemos y envejecemos; y, lo más importante, nos dice cómo todos estos males
pueden ser superados, y cómo podemos traer salud, felicidad y verdadera
prosperidad a nuestras vidas y a las de otros también (si en realidad la desean para sí mismos).
Tomado del Libro " El Sermon del Monte " de Emmet Fox
Tomado del Libro " El Sermon del Monte " de Emmet Fox